sábado, 19 de marzo de 2016

Cueva del Gándara por el Pozo del Oso

Participantes: Pilar y el que escribe, Carlos Heras


Como casi siempre, la semana santa no comenzaba con muy buen tiempo, así que tocaba un cambio de planes de última hora que evitase la lluvia. En esta ocasión, sorprendentemente, las tormentas evitaban Cantabria y decidimos poner rumbo directo allí el sábado temprano. Como íbamos con con muchas ganas de cueva, nada más llegar pensamos en pasarnos por la cueva del Gándara. 


En esta ocasión y por primera vez descendimos el Pozo del Oso, el cual no es de gran belleza, pero nos deposita en una serie de grandes galerías cómodas de recorrer. Nuestra idea consistía en llegar a los colectores y desde esa zona tratar de acceder a la sala del ángel.
Desde la base del pozo y después de haber echado un vistazo al esqueleto del oso cavernario, 



...continuamos por amplias galerías las cuales nos conducen a una sala en la que se precipita una bonita cascada de unos 8 metros. 



Tras echar unas fotos continuamos en dirección a la Galería de los Tentáculos siempre por las galerías de enormes dimensiones a las que nos tiene acostumbrados este sistema.


La Galería de los Tentáculos llama la atención por la gran cantidad de estalactitas con formaciones esféricas en uno de los laterales, como si del tentáculo de un pulpo se tratara. 





A continuación salimos de esta galería por unas estrecheces no muy complicadas pero sí un poco largas. Ya en el otro lado volvemos a las grandes dimensiones de la Galería de los Menhires que tras unas trepadas nos sitúan en el colector de la Gándara. En este punto la roca se ennegrece y podemos ver el agua. 


Continuamos por el "Ruisseau des tulipes" en búsqueda de una conexión a la sala del Ángel. El avance por esta galería es un poco penoso, trepadas, destrepes, gateras...después de un rato decidimos darnos la vuelta, ya llevábamos horas de cueva y queríamos guardar energías para la semana que teníamos por delante. Poco a poco fuimos desandando el camino, volviendo a disfrutar de la galería de los Tentáculos y de los bonitos rincones que esconde este kilométrico sistema.